Hungría planea desplegar al Ejército ante la masiva llegada de refugiados

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Budapest analiza cómo podría utilizar a sus Fuerzas Armadas para garantizar la seguridad en su frontera sur con Serbia, en donde construye una valla que controle el acceso a la UE

agencias / budapest-berlín
La marea de refugiados procedente de Siria y, que atraviesa el corredor balcánico para alcanzar Europa, está desbordando al Gobierno de Hungría, que observa cómo cada día que pasa, el flujo de inmigrantes es cada vez mayor. Ante este hecho, el Ejecutivo de Budapest analiza la forma de utilizar al Ejército para garantizar la seguridad en la frontera sur con Serbia, hasta donde han llegado miles de refugiados que aspiran a entrar en la Unión Europea, según reconoció ayer un portavoz del Gabinete magiar, Zoltan Kovacs. 
«El Gobierno y el centro de seguridad nacional han debatido la cuestión de cómo podría utilizarse al Ejército para proteger la frontera de Hungría y la de la UE», avanzó Kovacs, que aclaró que cualquier decisión definitiva recae en el Parlamento. 
La mayor crisis de refugiados que vive Europa desde la Segunda Guerra Mundial está dejando escenas de desesperación en los países del este, donde miles de personas se arriesgan a pasar varias fronteras en una peligrosa y larga ruta hacia el centro y el norte del continente. 
En el caso del país magiar, un gran número de sin papeles y solicitantes de asilo llegan desde Serbia. Muchos aprovechan los huecos de la barrera aún sin acabar que ha ordenado levantar el Gobierno de Viktor Orban para llegar a territorio húngaro.  
Además, un centro de recepción de inmigrantes y refugiados en la frontera con Serbia registró un pequeño altercado durante el cual la Policía húngara empleó gases lacrimógenos, según las imágenes difundidas por la televisión. 
Un reportero de Reuters en el lugar de los hechos en la zona fronteriza de Roszke indicó que los agentes habían rodeado a un grupo de unos 400 inmigrantes y solicitantes de asilo. Al final, la algarada acabó remitiendo. 
Por otro lado, la canciller germana, Angela Merkel, defendió que en Alemania «no hay tolerancia» para la xenofobia después de ser abucheada por un grupo de unas 50 personas durante su visita, por primera vez, al centro de refugiados de Heidenau, localidad del este del país donde se registraron violentas protestas por la llegada de inmigrantes el pasado fin de semana. 
«No hay tolerancia para aquellos que cuestionan la dignidad de otros, no hay tolerancia para aquellos que no están dispuestos a ayudar cuando la ayuda legal y humana se requiere», aseveró.
Alemania es el país que más solicitantes de asilo recibe en la UE, y el Gobierno prevé que este año la cifra se multiplique por cuatro hasta alcanzar los 800.000. 
 
DRAMA EN EL MEDITERRÁNEO. Una vez más, el Mediterráneo fue protagonista de un intento de un grupo de sin papeles por alcanzar las costas italianas. En esta ocasión, al menos 50 inmigrantes fueron encontrados muertos en una embarcación cerca de Libia, según informó la guardia costera italiana. 
El medio centenar de cadáveres fue hallado en la bodega del barco y la causa del fallecimiento habría sido, posiblemente, la asfixia. Según medios locales, en el mismo bote viajaban unas 430 personas, que fueron rescatadas por la nave Poseidón.