La idea de poner en marcha una Casa de la Cultura en Arévalo promovida por la Asociación La Alhóndiga Cultura y Patrimonio está más cerca de convertirse en realidad. La condición imprescindible para llevar a cabo el proyecto era disponer de un espacio lo «suficientemente amplio» como para que pudiera acoger «exposiciones, conferencias y un centro de estudios» y el colectivo cultural parece haberlo encontrado, aunque todavía faltan por «concretarse» detalles sustanciales, advierte su presidente, Juan Carlos López.

El local que tiene visos de convertirse en Casa de la Cultura es el que fue centro de recreo de Caja de Ávila en Arévalo, situado justo encima del Cine-Teatro Castilla, un espacio que «la Fundación Caja de Ávila está dispuesta a cedernos siempre que nos hagamos cargo de los gastos» derivados del uso de ese espacio, como «la luz o el agua», explica López, que agradece el gesto a la actual propietaria de ese edificio después de que «primero solicitáramos al Ayuntamiento de Arévalo un local municipal para destinarlo a Casa de la Cultura sin que hayamos tenido ninguna respuesta», lamenta.

Sin embargo, la buena disposición mostrada por la Fundación Caja de Ávila  anima a La Alhóndiga a seguir adelante con el proyecto y ahora se centra en «buscar la forma de obtener los 500 euros mensuales» que necesitaría el colectivo cultural para afrontar esos gastos. Para ello, pone a disposición ese local para que allí se lleven a cabo «cursos y otras actividades» cuyos alumnos tendrían que abonar una cuota que se destinaría a sufragar los gastos generales del espacio.

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