El Colectivo ecologista Azálvaro ha presentado una denuncia ante el Servicio de Protección a la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) tras detectar «una alta mortalidad de aves rapaces protegidas en el parque eólico situado en el término municipal de Ávila» en el transcurso de una campaña de vigilancia puesta en marcha este verano precisamente para «localizar rapaces accidentadas en parques eólicos y tendidos eléctricos en el sureste de la provincia», según ha informado la asociación conservacionista.
En las revisiones llevadas a cabo en julio y agosto, el Colectivo Azálvaro encontró restos de ocho rapaces (cinco buitres leonados, un buitre negro, un milano real y un águila ratonera), la mayor parte de los cuales «correspondían a animales muertos recientemente, lo que refleja una alta tasa de accidentalidad sobre todo teniendo en cuenta el escaso número de máquinas que posee esta instalación» eólica (18 aerogeneradores)», destaca la asociación ecologista, que debido a «la gravedad de los hechos» por afectar a «especies protegidas» también ha dado traslado de sus hallazgos al Servicio Territorial de Medio Ambiente de Ávila, al que se además ha solicitado información sobre los datos de colisiones de años anteriores y del seguimiento ambiental de los parques eólicos.
El Colectivo Azálvaro considera que «la localización de las rapaces muertas pondría de manifiesto las deficiencias en el seguimiento ambiental del parque eólico» en el que han sido halladas, además de resultar «llamativo que se acumulen tantos cadáveres sin retirar en una instalación que se supone ha de ser revisada periódicamente y en la que el promotor debe alertar al Servicio Territorial de Medio Ambiente si se producen colisiones de especies protegidas», advierte la asociación conservacionista.
En una primera valoración, el Colectivo Azálvaro constata que «la mortalidad de rapaces protegidas en parques eólicos en el sureste de la provincia de Ávila sería mucho mayor de la que se sospechaba» porque sus miembros han encontrado aves muertas en otras instalaciones de este tipo y ya en julio de hace un año SEO/Birdlife denunció la muerte en un parque eólico de las Navas del Marqués de un buitre negro marcado dentro del programa de conservación de esta especie que se lleva a cabo en el Parque Nacional del Guadarrama, apunta. En este sentido, recuerda que «en el Sureste de Ávila se concentran gran número de parques eólicos (once, con un total de 200 aerogeneradores) y tendidos eléctricos peligrosos entorno a una comarca, la del Campo Azálvaro, donde hay una gran variedad y abundancia de rapaces carroñeras, precisamente las especies más susceptibles de accidentarse con aerogeneradores y tendidos eléctricos».