El Ayuntamiento de Navaluenga no está dispuesto a que las subidas de tarifas de la luz le ‘amarguen’ las cuentas, por lo que ha puesto en marcha un nuevo plan de eficiencia energética con el que espera reducir el consumo en «al menos un 30 por ciento».

Según explica el alcalde de la localidad, Armando García Cuenca, este plan se une al que ya se puso en marcha en 2009 gracias a una subvención de la Junta de Castilla y León y que sirvió para cambiar más de cien farolas por otras de doble nivel y de bajo consumo, lo que en su momento ya posibilitó reducir el consumo de luz municipal en un 30 por ciento y de esta forma impedir que se note la subida de precios.

Precisamente por ello, comenta el regidor que es uno de los proyectos que «más ha ayudado a ahorrar, puesto que se ha paliado el efecto de las subidas y no ha afectado a las arcas públicas».

Esta segunda parte viene a  continuar esta labor, aunque ahora lo que ha decidido el Ayuntamiento es modificar todos los cuadros de alumbrado municipal y colocar relojes astronómicos y así «no se pierde ni un minuto de luz». La forma en la que trabajan estos relojes es automática y así se encienden o apagan las luces dependiendo de la época del año y la situación, adaptándose a las necesidades de luz y eliminando así una labor que se hacía antes de forma manual y que obligaba a cambiar los horarios cada quince días. Entre las ventajas de este nuevo sistema se encuentra además, comenta el alcalde de Navaluenga, que necesita «poco mantenimiento».

Farolas. No es la única acción que se ha llevado a cabo puesto que también se han adaptado todas las instalaciones municipales a dos líneas de luz, de forma que al llegar determinada hora se apaga una de las líneas, lo que supone que no continúan funcionando las farolas impares del municipio. Este ‘apagón’ se realiza a las 12 de la noche en invierno y a las 2,00 en verano.

De esta forma, si en un principio se prevé ahorrar un 30 por ciento en el consumo de luz, se cree que con la reducción de uso de las farolas este ahorro puede llegar incluso al 40 por ciento.

Esto no impide, continúa el alcalde, que en la localidad haya suficiente luz, por lo que comenta que no ha habido ningún problema con los vecinos debido a esta decisión de suspender la luz en una parte de las farolas, «puesto que entienden que es necesario hacer algunos ajustes para no tener que recortar en otras cosas».