La cooperante Sara Escudero marcha de nuevo a Sierra Leona

Ana Agustín
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La responsable de Voluntariado y Formación de Cruz Roja en Ávila participar en la construcción del segundo centro de tratamiento del ébola, que se situará en Kono

La cooperante Sara Escudero marcha de nuevo a Sierra Leona

La cooperante de Cruz Roja Española en Ávila, Sara Escudero, viajará a Sierra Leona este miércoles para participae en la construcción del segundo Centro de Tratamiento del Ébola que afronta esta organización no gubernamental en colaboración con la Media Luna Roja.

De tal manera, la responsable de Voluntariado y Formación de esta organización no gubernamental en Ávila, ingeniera civil de formación, se enfrentará de nuevo a uno de los retos más importantes que ha llevado a cabo no sólo como profesional sino como persona. Bien es verdad que la esperiencia es un grado y Sara ya formó parte activa del equipo de técnico de Cruz Roja Internacional que levantó el primer centro de estas características, que se ubicó en Kenema y cuyas características son muy similares al que se alzará  ahora en Kono. Así lo afirma esta cooperante abulense que considera que su estancia se prolongará por espacio de unas tres semanas o un mes, tiempo en el que deben dejar perfectamente finalizada la obra, completamente segura y ocupado al cien por cien. La instalación en la que Sara trabajará tendrá una superficie de unos 10.000 metros cuadrados y tendrá capacidad para 60 pacientes de manera simultánea, «aunque hay mucha rotación porque hay fallecimientos y, afortunadamente, también altas». Una sala de triaje, dos de alto riesgo, otra para casos sospechosos y otra de nivel 2 (confirmaciones de contagio) son algunas de las zonas en las que se dividirá este centro.   El viaje se enmarca dentro de la operación de emergencias que Cruz Roja puso en marcha con motivo del brote del virus de ébola y afronta la misión con gran ilusión y fortaleza. No en vano, Escudero sabe ya a lo que se enfrenta. Lo mejor es saber que gracias a infraestructuras sanitarias como esta en cuya construcción va a colaborar de manera intensa y directa, se curan muchas personas. «La mayor alegría es saber que gente se ha curado. En el primer centro se han dado ya más de 160 altas». Sin embargo, «sabemos que debemos extremar la precaución». Así, cuenta que el contacto físico estará prohibido y la presión a la que se verá sometido el equipo humano del que formará parte será muy elevada». Se trata de un grupo técnico que ofrece diferentes perfiles. Fontanería, carpintería, electricidad son algunas de las disciplinas técnicas que se requieren pero también otras que den solución a necesidades sanitarias.