La guinda al pastel. Ha tenido que ser con la temporada en marcha pero todo lo bueno se hace esperar. El Real Ávila hacía oficial en la mañana del viernes el acuerdo con Rui, que volverá a vestir una temporada más la elástica encarnada después de una pretemporada en la que siempre tuvo abiertas las puertas del Adolfo Suárez a la espera de conocer si alguna de las muchas ofertas que tuvo en todo momento sobre la mesa, tanto del extranjero como de Segunda B, convencían al central. Finalmente el defensa declinó las últimas proposiciones y, por segunda vez en su carrera deportiva, vestirá la camiseta del Real Ávila.  

Lo cierto es que desde la semana pasada Rui estaba más cerca de sumarse al nuevo proyecto del Real Ávila, del que ha formado parte durante la pretemporada a la espera de una decisión, que de marcharse, si bien las negociaciones no han sido sencillas dada la calidad de un jugador especialmente bien recibido por el cuerpo técnico, club y grada, que guarda del defensor un buen recuerdo tras su paso por el equipo entre el 2007 y 2009, dos temporadas en las que estuvo a las órdenes de José ‘Chino’ Zapatera antes de abandonar el equipo rumbo a la Segunda B con el Palencia. Ahora lo tendrá bajo sus órdenes Francisco Sánchez ‘Kiko’, que incluso podría tenerlo a su disposición en el encuentro que este sábado disputará el equipo ante la Arandina. «Su incorporación sería posible» avisaba el técnico ante un jugador del que siempre ha reconocido que supondría un «salto de calidad» para el nuevo proyecto.

«Era un fichaje esperado por todos. Todos sabemos de su calidad, de su experiencia, lo que puede aportar» comentaba al poco de hacerse oficial la incorporación del internacional con Guinea Ecuatorial.

De salvarse a tiempo todo el trámite burocrático, Rui se perfila incluso como titular de cara al encuentro en El Montecillo. No necesita adaptación. Su presencia con los encarnados durante la pretemporada, con los que incluso ha llegado a disputar los encuentros amistosos, permitirían su paso al once inicial en cualquier momento. Un once donde, todo indica, formará pareja en el centro de la zaga con Cabrera.