Se encontró la Cultural Deportiva Cebrereña con un buen rival y un mejor delantero en su último examen de pretemporada antes del arranque de la competición oficial. Un partido de sensaciones dispares.Las que dejó una primera mitad en la que los culturalistas dominaron por momentos el partido, y una segunda parte en la que fueron dominados por Borja, José y sobretodo Sergio, un ‘gigante’ en el área con el que sentirse capaz de ir a la guerra a cualquier campo. Tras una primera mitad igualada, el Azuqueca derribó El Mancho ÁngelSastre en apenas un minuto –del 63’ al 64’– rompiendo el partido (1-3) y poniendo el punto y final al examen culturalista.
Segura de sí misma, como segura sobre un once que bien podría arrancar el curso oficial ante la Segoviana, recibía la Cultural Deportiva Cebrereña al Azuqueca en un duelo amistoso en el que nadie podía perder de vista que la temporada comienza en una semana. No era un partido más, era un duelo para llevarse las mejores sensaciones posibles. Y entre ellas estaban las del gol, ese objeto preciado y precioso en el que no se han prodigado los culturalistas esta pretemporada. Apenas se había llegado al primer minuto de juego lo pudo encontrar el equipo de Pepe García cuando Terleira caía a banda, centraba al área y Mario se lanzó al remate. Lo hizo con el pie. El remate era claro, pero de cabeza. No llegó al cuero pero era un buen inicio de partido.
Fer y Víctor se hicieron fuertes en el centro del campo, Diego Pérez la pedía y Mario Hidalgo se dejaba ver por todo el frente de ataque. Del cuarteto de protagonistas arrancaría la jugada del gol –minuto 20– cuando el equipo recuperaba en el centro del campo y Diego Pérez lanzaba la contra. Aguantó bien el balón para abrir en banda a Mario, que vio el desmarque de David Terleira, que forzó el penalti. El ‘9’ sacó su experiencia a relucir cuando regateó hacia el exterior e Ignacio le derribaba. El ‘9’ tomó el balón para rematar a puerta desde los once metros y hacer el 1-0.
El gol no varió los planes iniciales del Azuqueca ni los de Sergio, un ‘9’ a la vieja usanza. Alto, corpulento y rematador, ya había avisado en el arranque del partido con un buen cabezazo. Esta vez lo haría con el pie y encontraría el gol. El delantero recogería el rechace de Alberto, de nuevo bajo palos, para rematar al palo contrario con el portero ya batido. Encontraba el empate (1-1) el Azuqueca en el 27’ aunque bien pudo verse de nuevo por detrás en el marcador apenas dos minutos después cuando Mario Hidalgo, por el que pasaba todo el juego, ponía un gran centro desde la banda. La rosca acercó el cuero al segundo palo, donde Terleira se lanzó con todo. No llegó por un suspiro. Controlaba el partido la Cebrereña. Tenía que reaccionar el Azuqueca. Encontró la salida en el físico de Sergio y la calidad de Borja, que empezó a mostrarse.
Apretaba el calor y apretaban los dos equipos. Quiso hacer el segundo Terleira, esta vez de cabeza y esta vez a centro de Súper. Se midió en el salto a Ignacio, pero su remate golpeaba el larguero. Era un toma y daca. José –minuto 43– pondría prueba los puños de Alberto cuando lanzaba con dureza una falta desde la frontal.
Toda la fortaleza que mostró la Cebrereña en la primera mitad se derrumbó en apenas un cuarto de hora en el arranque de la segunda. O mejor dicho, en un minuto, el que transcurrió entre el 63’ y el 64’, cuando el Azuqueca lograba dos goles. Avisó José de inicio en una nueva falta desde la frontal que Javi Gordo, que comenzaba la segunda mitad bajo palos, detenía por bajo. Nada podría hacer por evitar el 1-2. Ya había dado muestras de su calidad Borja cuando cogió el cuero, arrancó desde la mediapunta y entrando en el área desde segunda línea se marchó de todos para poner el balón en boca de gol, donde Alejandro, lateral, sólo tenía que empujarla. El gol le hizo daño, y mucho, al equipo culturalista, que un minuto después –minuto 64– recibiría el segundo. Le sacó todo el partido posible Sergio a su corpulencia para bregar con la defensa, ganar el espacio y rematar en boca de gol para hacer el 1-3.
No bajó los brazos la Cebrereña. Tras una gran falta de David Terleira, llegó un gran remate de Ruba. Cabezazo imponente del central a saque de córner –minuto 70– y gol del central (2-3) para recortar distancias y recuperar sensaciones. Pero en la tarde del sábado las sensaciones eran de Sergio. Tiene el equipo ‘rossonero’ en su delantero una de sus mejores virtudes. Tercero en su cuenta particular y 2-4 en el global cuando el ‘9’, tras una contra del Azuqueca y el rechace de Javi Gordo a disparo de José, remataba con dureza al fondo de la red.El carrusel de cambios ya había desdibujado un choque que dejó dos caras de una Cebrereña aún con mucho que pulir pero jugadores para hacerlo.