Aldeavieja, Amavida y Gimialcón verán mejoradas sus iglesias

I.Camarero Jiménez
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El convenio que cada año firman la Diputación y el Obispado de Ávila contempla una partida de 120.000 euros que se destinarán a las cubiertas de los templos «elegidos por criterios técnicos»

En muchos casos, en los pueblos pequeños y para las gentes que los habitan, sus iglesias y ermitas son uno de sus patrimonios más preciados y el hecho de que las administraciones ayuden a su cuidado es muy de agradecer para ellos. En ese sentido se mantiene vivo desde hace años el convenio que firman año tras año la Diputación y el Obispado de Ávila que permite que esos pequeños templos (que no tienen la categoría de Bien de Interés Cultural) se mantengan en pie. Son 120.000 euros los que se ponen en marcha en este 2018 de los cuales cada institución pone el 50%. Ese dinero no sólo ya tiene destino sino que incluso las obras están ejecutadas, tal y como lo explicaba este jueves el arquitecto de la Diócesis de Ávila, Luis Carlos García. Las iglesias elegidas han sido las de Gimialcón, Aldeavieja y Amavida y los trabajos de reparación de cubiertas ya se han terminado en la primera y la última, mientras que a la segunda, si todo va según lo previsto y las lluvias no se interponen en la reforma le queda "un mes o mes y medio"  para que el trabajo quede finiquitado.

El presidente de la Diputación de Ávila, Jesús Manuel Sánchez Cabrera tras la firma del convenio quiso agradecer alobispo de Ávila, Jesús García Burillo el hecho de que «siempre esté receptivo a colaborar con la Diputación» y más en el marco de un convenio que se materializa por el bien de todos los abulenses ya que se trata de trabajar por el patrimonio y colaborar.

El convenio se centra sobre todo en la reparación de tejados y cubiertas de las iglesias y ermitas de la provincia que suman, tal y como especificó el obispo, en torno a las 400. Mantener esas estructuras es fundamental para preservar el resto del templo, en este caso sí habría que empezar la casa por el tejado. 

Los criterios para elegir los templos en los que actuar son «técnicos», destacaba Sánchez Cabrera. Son los especialistas los que tienen que seleccionar aquellos en los que hay mayor necesidad de intervención rápida.

El caso es que esta vez el dinero se reparte entre los más de 47.200 euros que se destinan a Gimialcón, donde era necesario hacer obras en la cubierta y tejados del presbiterio para proteger entre otras cosas un «magnífico artesonado»; a Aldeavieja donde se trabaja en el retejado de la nave principal con algo más de 40.300 euros y también en los tejados de la iglesia de Amavida.

Conservar estos templos va más allá del aspecto religioso para el que fueron concebidos, señalaba el presidente pues se trata de «conservar una seña de identidad». Además justificaba la colaboración porque «así nos lo piden alcaldes, concejales y vecinos».

En el mismo sentido se expresaba García Burillo que destacó «la alegría y el gozo» que le produce el momento de volver a firmar este convenio. Además del valor extraordinario que los templos tienen para los vecinos porque «es su patrimonio». «Es una responsabilidad muy grande para la iglesia pero es un patrimonio que nos afecta a todos» .

El arquitecto Luis Carlos García hablaba de estas iglesias y ermitas como «unos niños caros» porque «cuesta cuidarlos» pero «con colaboración es mejor», al menos más factible. Además esa colaboración es una «bolsa de aire» que permite afrontar los trabajos e incluso «llegar a más». 

Explicaba además de las cubiertas y su minucioso mantenimiento son vitales «para tener menos problemas» y apostaba por intervenir de manera cíclica en ellas para evitar males mayores «cada 20 ó 30 años» como se está haciendo por ejemplo en Aldeavieja, donde como decíamos resta  un mes o mes y medio de obra para llegar a la conclusión.

En el caso de Gimialcón se ha tenido finalmente que cambiar la estructura entera, apuntaba, pero la obra ya está terminada.