Veinticuatro farmacias rurales solicitan las ayudas de Diputación

Mayte Rodríguez
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El propósito de esta convocatoria es facilitar la implantación de la receta electrónica, sobre todo a aquellas boticas de la provincia consideradas de viabilidad económica comprometida

Un total de veinticuatro farmacias rurales de la provincia de Ávila han solicitado las ayudas económicas que otorga la Diputación Provincial con el fin de facilitar la implantación de la receta electrónica, para lo cual las boticas tienen que realizar inversiones en equipos tecnológicos que permitan prestar este servicio. Esta línea de ayudas dotada con 20.000 euros está dirigida a todas las farmacias situadas en el medio rural, aunque priorizándose a aquellas consideradas  de viabilidad económica comprometida, que representan el 23% de las 109 boticas situadas en zonas rurales de  Ávila y que ascienden a 25. Finalmente, han sido 24 las boticas que han presentado la solicitud, según los datos facilitados a este diario por la institución provincial a fecha 28 de octubre.

Aunque la convocatoria todavía no ha sido resuelta porque el plazo máximo de presentación de la documentación ante el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Ávila finalizó el 31 de octubre, los fondos que percibirá cada una de las beneficiarias dependerán precisamente de su  situación económica, de manera que las farmacias que  facturen menos de 200.000 euros anuales y por ello estén catalogados como de viabilidad económica comprometida para el año 2015 recibirán un máximo de 720 euros, mientras que las boticas cuya facturación anual sea mayor de esa cifra podrán recibir 500 euros, según figura en el acuerdo suscrito entre la Diputación Provincial y el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Ávila y del que en su día informó la institución provincial.

La previsión es que «antes de que acabe este año la convocatoria esté resuelta y las farmacias que resulten beneficiadas hayan recibido el dinero que les corresponda», señala la presidenta del Colegio Oficial de Farmacéuticos, Dolores Rodríguez Bautista.  Precisamente, esta línea de ayudas tiene su razón de ser en el  «esfuerzo económico que supone para las oficinas de farmacia rurales» la implantación de la receta electrónica, dado que  «tendrán que adaptar su tecnología a los nuevos procesos de gestión farmacéutica», explicaba la Diputación, comprometida así con los intereses de los habitantes de las zonas rurales, ya que «las 109 farmacias rurales  dan cobertura al 91% de la provincia», a pesar de lo cual la viabilidad económica de una parte de ellas está en riesgo, de ahí estas subvenciones.

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