Ya ha llegado el tan ansiado primer reparto de fondos para los 44 Grupos de Acción Local (GAL) que desarrollan su trabajo en Castilla y León y por tanto también a los cuatro que operan en Ávila. Se trata de dotar económicamente a las estrategias que tienen proyectadas, en principio para una horquilla de tiempo que va de 2014 a 2020.
En total se reparten 52 millones de euros de un montante global que alcanzará los 130, es decir, se da salida al 40% de ese total. De esos 52 millones, 4,7 se los repartirán los grupos abulenses: lo harán a razón de algo más de 1.170.000 euros que irán a parar a la Asociación para el Desarrollo Rural Integral de La Moraña (Adrimo); 1.215.000 euros para la Asociación Intermunicipal para elDesarrollo Rural de la Comarca Barco Piedrahíta y Gredos (Asider); 1,3 millones serán para la Asociación para el Desarrollo Rural de Ávila (Aderavi) y por último 1.015.000 euros para el Centro de Desarrollo Rural Valle del Tiétar (Tiétar), tal y como figura en el Bocyl de este jueves.
Cabe destacar que de los 4,7 millones casi 1,2 serán en exclusiva para los gastos de funcionamiento (personal, alquileres, asesoría, suministros, gastos financieros...) que dependiendo de la asociación oscila entre 250.000 y 325.000 euros en números redondos.
Indagando en las estrategias de desarrollo local a las que se hará frente con estas subvenciones (que son 80% de fondos europeos y el resto, fondos estatales y regionales) tienen como objetivo el que se puedan financiar «actividades en el medio rural que dinamicen los territorios, preferentemente generando puestos de trabajo».
Con esta primera cuantía económica se trata de hacer frente a la planificación adecuada de la distribución de fondos durante todo el periodo en el que van a llevar a cabo su acción (hasta 2020). El resto de financiación se irá asignando con la aplicación de criterios de eficacia en la ejecución de los proyectos.
Así las cosas los 44 Grupos de Acción Local que se han autorizado en la Comunidad desarrollarán actuaciones en base a proyectos productivos o no productivos que se presenten en el marco de convocatorias públicas de los propios grupos, y podrán, además, financiar los gastos de su propio funcionamiento. Podrán hacerlo justificando estos gastos desde el 1 de enero de 2016.
La orden publicada ayer constituye el inicio para las actuaciones que llevarán a cabo los Grupos de Acción Local, al que seguirá la firma de los convenios con cada uno de los GAL delimitando las responsabilidades de cada uno de ellos. A partir de la firma de estos convenios podrán abrir las convocatorias para proyectos.
Los 130 millones de euros que irán destinados a los Grupos de Acción Local tendrán como objetivo la financiación de todo tipo de necesidades de las zonas rurales.
La tipología de los proyectos se clasifica en productivos (aquellos que generan actividad económica y crean o mantienen puestos de trabajo), no productivos (no generan actividad económica pero se consideran necesarios para el territorio como actuaciones culturales, rehabilitación del patrimonio artístico, arquitectónico, medioambiental, etnográfico, etc.), y proyectos de formación que contribuyan a conseguir unos mejores resultados de las estrategias aplicadas. También podrán desarrollarse proyectos de cooperación entre grupos con el objetivo de hacer interrelacionar actuaciones en el medio rural.