La financiación autonómica tendrá que esperar

SPC
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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, asegura que «no hay tiempo material» para poder cambiar el sistema, pero sí para hacer unas mejoras en las partidas que vayan a recibir todas las comunidades

En su primera Sesión de control, concretamente en el Senado, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aseguró ayer que no hay «tiempo material» en esta legislatura para poder reformar el sistema de financiación autonómica en su conjunto, aunque el Ejecutivo tiene la intención de hacer mejoras de la financiación de todas las comunidades.

Asimismo, el líder del Ejecutivo sostuvo que hay que ser «ambiciosos» con este tema, pero también «realistas», y que La Moncloa es consciente de que «no va a dar tiempo material» en esta legislatura para renovar por completo el conjunto del sistema, pendiente de reforma desde hace varios años.

Lo que sí hará el nuevo Gobierno es efectuar mejoras «en todas y cada una» de las comunidades a lo largo de los próximos meses, antes de la convocatoria de elecciones generales, que será, presumiblemente, en 2020, como adelantó en su primera entrevista televisada el día anterior. 

En los dos años que quedan hasta entonces, el político madrileño pidió al Partido Popular que sea leal, y que, aunque pueda ser adversario del PSOE, no sea rival del Estado «alimentando el agravio y la confrontación territorial a cuenta de Cataluña». Sánchez respondió de esta forma a una pregunta del portavoz del PP, José Manel Barreiro, sobre los apoyos parlamentarios con los que cuenta para promover la cohesión y la estabilidad.

A renglón seguido, el socialista lamentó que el bloque conservador intente suscitar algunas dudas sobre el PSOE y pretenda hacer creer que son los únicos que defienden la unidad de España.

Frente a ello le pidió no volver a las «mesas petitorias» contra el Estatut, que recordó que fue recurrido por el PP ante el Constitucional. También resaltó que es la única comunidad con un estatuto no aprobado por sus ciudadanos y que «ese es un problema político que tenemos que resolver».

Además, dijo que «las debilidades del anterior Gabinete, son la fortaleza del nuevo:La regeneración democrática y la justicia social».

Barreiro negó que su partido pretenda sembrar dudas, para luego considerar que quien las genera es la actuación de Sánchez con contradicciones sobre sus propias opiniones, y puso como ejemplo de ello que el día anterior dijera que piensa agotar la legislatura cuando antes aseguraba que no lo iba a hacer.

intervención de 14 ministros. En la Sesión de control participaron 14 de los 17 ministros de Sánchez. Entre ellos, la titular de Justicia, Dolores Delgado, que no desveló si impulsará la derogación de la «inhumana» prisión permanente revisable.

Mientras, el responsable del Interior, Fernando Grande-Marlaska, pidió al PP que no genere alarma sobre el acercamiento de los presos de ETA al País Vasco, y recordó que fue un ministro del Interior de ese partido quien dijo que, una vez disuelta la banda terrorista, no tendría sentido la política de dispersión. 

Por otra parte, la ministra de Política Territorial, Meritxell Batet, negó que la reforma de la Constitución Española que defienden el Gobierno central y los socialistas sea una contrapartida «a nada ni a nadie», en alusión al apoyo de los independentistas a la moción de censura que llevó a su líder, Pedro Sánchez, a La Moncloa.