Las prestaciones por desempleo que gestiona el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) en forma de prestación contributiva, subsidio, renta activa de inserción o programa de activación de empleo llegaron en el mes de octubre (el último mes del que se ofrecen datos) a 5.338 parados registrados como tal en Ávila en ese periodo. Teniendo en cuenta que ese mes se contabilizaban en el conjunto de la provincia 11.483 demandantes de empleo en las oficinas del antiguo Inem, la cifra de los beneficiarios de las prestaciones supone el 46,5% del total de desempleados, algo menos de la mitad. Según estos datos, más de 6.000 parados de la provincia no tuvieron derecho en octubre a ninguna prestación en este escalón de la protección estatal, aunque también hay que resaltar que este porcentaje de cobertura (la proporción de beneficiarios respecto al total de parados) ha subido ligeramente en los dos últimos años, no en vano en octubre de 2016 rondaba el 40% y un año después apenas superaba el 43%. Eso sí, todavía se está lejos de las tasas que se registraban en el inicio de la crisis económica, cuando los beneficiarios de prestaciones por desempleo superaban el 60% de todas las personas que demandaban un trabajo.