El fiscal de Seguridad Vial en Ávila, Óscar Barrios, ha solicitado tres años y dos meses de prisión para el conductor del autobús escolar  siniestrado el pasado día 23 de febrero de 2012 y en el que perdió la vida una adolescente de 16 años, además de producir heridas de diversa consideración a otras diez personas.

De tal manera, el chofer, G. F. V. H., de 64 años de edad, quedó en su día en libertad provisional por la decisión de la juez del Juzgado de Arévalo, que así lo decidió, aunque le fue retirado el permiso de conducir. Sin embargo, en estos momentos, el caso se encuentra ya en el Juzgado de lo Penal de Ávila, donde se celebrará juicio, previsiblemente, a finales de noviembre o principios de diciembre, tal y como ha informado a esta redacción el propio Barrios, aunque aún no hay fecha de señalamiento.

Con respecto a la calificación, el fiscal considera que los hechos que se juzgarán son constitutivos de un delito contra la seguridad vial por conducción temeraria, un delito de homicidio por imprudencia grave y siete delitos de lesiones por imprudencia grave por lo que solicita tres años y dos meses de prisión, además de cuatro años sin poder manejar ningún tipo de vehículo a motor, la declaración de pérdida de vigencia del permiso de conducir y diferentes indemnizaciones de las que deberá responder el acusado y la aseguradora de manera solidaria y la empresa propietaria del autobús y la Junta de Castilla y León, al ser un autobús que realizaba una ruta escolar; de forma subsidiaria.

La Fiscalía ha valorado diferentes hechos para redactar su escrito de acusación. Así, tal y como ha expresado a Diario de Ávila Óscar Barrios, parecer estar probado que el conductor, «de manera reiterada», no realizó las paradas obligadas ante las señales de stop y, por el resultado del estudio del tacógrafo, ha quedado demostrado que durante todo el recorrido circulaba a mayor velocidad de la indicada.

Además, en su escrito de acusación, el fiscal señala que el vehículo que conducía era «inadecuado para la ruta que realizaba» puesto que no cumplía con las prescripciones técnicas exigidas y, además, no era el que estaba autorizado por la Dirección Provincial de Educación, aunque sí estaba asegurado y contaba con la póliza vigente.

el accidente. El trágico suceso ocurrido en la provincia y en el que perdió la vida la joven vecina de Fontiveros, se produjo a las 8 horas del día 23 de febrero a la altura del kilómetro 68,500 de la CL-605, dentro del término municipal de Villanueva del Aceral. El microbús, que realizaba la ruta que va de Muñosanco a Arévalo, se salió de la calzada por el lado izquierdo y volcó junto a la cuneta. Hasta el lugar del accidente se desplazaba un helicóptero del 112, numerosas ambulancias también del 112 y Bomberos de Ávila y de la Diputación de Valladolid, que tuvieron que emplearse a fondo para excarcelar al conductor. Los heridos fueron trasladados tanto al hospital de Nuestra Señora de Sonsoles (adonde se llevaron a seis chicas y a dos chicos de entre 16 y 20 años), como al Hospital de Medina delCampo, en Valladolid,

El conductor, de 62 años de edad y natural de Magazos, llevaba en la empresa unos 7 años y  realizaba habitualmente esa ruta. Asimismo, practicada la prueba de alcoholemia, dio negativo en este control, tal y como indicó la Guardia Civil. En cuanto al automóvil, un microbús de 22 plazas, formaba parte de la renovada flota de la compañía que aseguró en todo momento dotar a sus autobuses de las últimos sistemas de seguridad y confort existentes.

Fuentes de la empresa declararon en su día a Diario de Ávila que el microbús siniestrado, de la marca Iveco, tenía unos cinco años de vida más o menos.