El Colegios Diocesanos AMS tuvo que esperar hasta el último suspiro del derbi ante el Bosco de Arévalo para quedarse con un triunfo más sufrido de lo esperado. Bien es cierto que los colegiales fueron superiores, sumaron ocasiones y dominaron, pero perdonaron en exceso ante un Bosco de Arévalo que se puso en manos de Nica y el oficio de Seidán para llevar al límite a los locales, que tuvieron que esperar al minuto 87 y a calidad de Javi Pérez para quedarse con tres puntos que ya se veían volar del Adolfo Suárez. El Bosco cumplió con su guión, remó todo el partido pero se quedó a la orilla.