El Real Ávila quiere su tercera victoria consecutiva. Querer es poder, y puede hacerlo el equipo encarnado, que tras vencer al Villaralbo (2-5) fuera del Adolfo Suárez y romper con el sambenito de ser el único equipo que no había ganado fuera de casa esta temporada, este domingo recibe a partir de las 17,00 horas al Burgos Promesas 2000. Un partido para reforzar «lo bueno» que viene haciendo el equipo en los últimos partidos, que después de tres derrotas consecutivas ante Unionistas, Astorga y Segoviana puede responder con la misma medicina, tres victorias consecutivas y el despegue definitivo