El Real Ávila necesitaba dar un golpe sobre la mesa para erigirse como gallito de este grupo 8 de Tercera División. Los de Jonathan Prado sumaban tres victorias en tres partidos en un fantástico inicio ligero. Sin embargo, hay encuentros que marcan rumbos y que permiten asestar auténticos golpes de mano. El de ayer era uno de ellos, por la dificultad del campo y del rival. La Virgen del Camino viajaba en los puestos cercanos al playoff, siendo un auténtico peligro cuando ejerce de local. Por todo ello, el choque era una prueba de fuego.

En el inicio del partido se vio a una Virgen dispuesta a intimidar a base de balones largos y llegadas por banda. Los de Roberto Carlos tenían muy claro que debían buscar el juego directo y las segunda opciones generadas por Revi. Así llegó una primera opción muy clara para el ‘9’ que no acertó en acomodar el balón. Superado el efecto efervescente de los locales, los encarnados tardaron un cuarto de hora para dar un golpe sobre la mesa: una excelente jugada de Peli por banda sirvió para que Garretas irrumpiese en el corazón del área poniendo en ventaja a sus compañeros.

Poco después fue Javi de Mesa quien tuvo una opción clara, con un mano a mano que detuvo Isma. Cogía poso el partido y sobretodo el mediocetro visitante, donde Edu y Peli hacían un trabajo excelente para cortar balones y aportar fluidez al juego.

Rubén cogió la brújula del partido y enlazó con Juli y De Mesa, siendo un quebradero de cabeza para el equipo verde. Con este guión llegó el segundo gol: error de comunicación en la zaga local sirvió para que Peli luciera velocidad y acierto. Por si fuera poco, los locales veían como su jugador más experimentado se lesionaba y debían reestructurar el equipo. Hasta llegados el descanso, los de Jonathan Prado bajaron revoluciones ante una Virgen muy inoperante.

Ya en la segunda parte, la Virgen dio entrada a Eriz, tratado de buscar más profundidad y filtrar más pases a los delanteros. Se notó mucho la ausencia de Saúl y la falta de forma de Dani Alonso. El mediapunta sigue sin coger su estado óptimo tras una larga lesión. La Virgen no tuvo margen de maniobra en su parcela creativa.

Iban pasando los minutos y el Real Ávila se hacía amo y señor del choque, y de nuevo una jugada por banda sirvió para que el central Garretas conectase un testarazo firmando su doblete y la goleada de los suyos. Se notaba en los locales la ausencia de un portero de envergadura, que pudiera acabar de bloquear el juego aéreo del rival.

Faltaba media hora donde el Ávila aprovechó para dar oportunidades a los menos habituales. No desentonaron ninguno de los que entraron (Iván, Roa y Raúl), pese a que el equipo se convirtió en un once más plano y con menos control de balón. Ahí vio su oportunidad la Virgen para recortar distancias. Lo intentó Revi y con varios balones colgados a pelota parada que ni Cristian ni Fran pudieron conectar.