Acaba la primera vuelta para el Real Ávila y lo hace en el Adolfo Suárez, donde este curso se ha encontrado «más a gusto». Fuera, los números dicen otra cosa. Siete derrotas y dos empates son las cifras de un equipo que ante La Bañeza (2-1) confirmaba que la primera vuelta la cerrarán sin conocer la victoria a domicilio. En casa, cinco, y en la mente una sexta con la que tratar de alejarse de un descenso demasiado cercano. Por delante, un rival complicado, el Zamora, que llega al Adolfo Suárez –17,00 horas– con la mente en el grupo de los elegidos. Mamadou, sancionado, Edu y Rober, lesionados.