Más de 430 ayudas y 231.000 euros en total es lo que repartió el pasado año la Diputación Provincial para atender situaciones de emergencia social en la provincia. Las más numerosas se solicitaron tanto para el pago del alquiler (138) de vivienda como para alimentación (136) aunque también se concedieron por otros conceptos no menos importantes, tales como alimentación infantil especial, adquisición de enseres básicos, gastos farmaceúticos, pago de la cuota hipotecaria o una para el levantamiento de un embargo de poco más de 200 euros.