Muchas lágrimas se han visto este jueves en la fiesta de fin de curso de la Casa Grande de Martiherrero. Lágrimas de emoción, tristeza, orgullo y alegría a partes iguales por la despedida del que durante 15 años ha sido director general del colegio, José Luis Retana, próximo obispo de Plasencia. Cercano, humilde, fiel, recto, cariñoso... han sido algunos de los muchos epítetos que los alumnos y trabajadores del centro, encabezados por el obispo de Ávila, Jesús García Burillo, han regalado a un emocionadísimo Retana. Su puesto será asumido por la hasta ahora directora gerente, Pura Alarcón.