El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha reflexionado esta mañana en Ávila sobre la realidad de lo que él considera «las dos amenazas de la democracia en nuestro tiempo», los nacionalismos y los populismos. En su opinión, ambas tendencias buscan subvertir el Sistema Constitucional y dinamizar el Estado de Derecho, aunque a priori sus objetivos puedan parecer distintos. Catalá ha esbozado en 5 puntos el paralelismo que encuentra entre populismo y nacionalismo, hablando por ejemplo de verdades fabricadas, el apoderamiento de la palabra o el desprecio al orden legal.