Se acabaron los partidos de los miércoles y se acabaron las dudas del Real Ávila, repuesto en lo físico y lo anímico después de un mes agotador con partido un día sí y otro también. Nueve partidos en apenas cuatro semanas, «tres jornadas sin ganar, y pese a ello, segundos». Reivindica César Jiménez, entrenador del Real Ávila, la labor de los suyos en uno de los tramos de la competición más complicados y que dejó por el camino los empates ante el Numancia B y Astorga o la derrota, primera y de momento única, ante el Zamora. «Veía al equipo cansado» señala César Jiménez.