«Tenemos entrenadores en seis ciudades"

M.M.G.
-

Sonsoles Hernández Sánchez es la directora y fundadora de Traïnsplant, entidad enfocada al asesoramiento y a la preparación física de personas con enfermedad crónica o trasplantadas, algo del todo innovador en nuestro país.

SONSOLES Hernández (Ávila, 1983) es el claro ejemplo de que un niño al que se le considera mal estudiante sólo necesita encontrar aquello que le motiva y en lo que es bueno en la vida. Porque se puede no ser bueno en Física pero ser un excelente literato. O suspender una y otra vez Matemáticas pero estar preparado para ser el mejor profesor de Educación Física del mundo. Pues algo así es lo que le pasó a Sonsoles, alma de Traïnsplant, una entidad privada («aún no es empresa, pero lo será», dice) dedicada a asesorar en el ejercicio físico a personas trasplantadas o con enfermedades crónicas, entre otras funciones. «Yo era malísima estudiante», comienza a recordar Sonsoles su infancia para Diario de Ávila.? Después de repetir algún curso y de llegar a pensar «que no iba a hacer nada en la vida» o «que era la peor persona del mundo», escuchó a un amigo hablar sobre el módulo de Técnico Superior de Actividad Física y Animación Deportiva (Tafad). Y ella, que desde pequeña había sido una enamorada del deporte (sobre todo del kárate y del fútbol» vio entonces el cielo abierto.

¿Qué es lo primero que le viene a la cabeza sobre Ávila?

Cuando pienso en Ávila pienso en el frío. Pero también es el lugar donde ha nacido todo lo que tengo. Me gusta mucho por eso porque es la raíz de la parte deportiva, de la parte profesional y de la parte sentimental, porque de hecho mi marido es de aquí.

¿Qué es lo que más le gusta de Ávila?

La tranquilidad, pero también es lo que menos me gusta.

¿Y lo que menos?

Que la gente no está por innovar. Preferimos estar en Ávila tranquilos que no ir un poco más allá y que algo perturbe nuestra tranquilidad.

Un lugar en el que se perdería.

El Soto. Porque es un lugar muy entrañable. Fue donde me preparé mis pruebas de INEF y para mí es un sitio espectacular.

Un recuerdo de su infancia.

Me recuerdo en el Hospital de Nuestra Señora de Sonsoles, porque iba a las sesiones de diálisis con mi padre. Es un lugar que ha marcado toda mi vida y me sigue marcando a día de hoy. 

Un personaje abulense que le haya marcado.

Mi madre. Porque quizá la fuerza que tiene me la haya transmitido a mi carácter profesional. 

¿Cuál es el mayor cambio que necesita Ávila?

Que se deje querer por las personas que somos jóvenes y que queremos hacer cosas aquí. Hay muchos y muy buenos. Y no se está dando la oportunidad profesional para que traigamos cosas como proyectos y demás. 

¿Qué tiene que mantener?

Su carácter cercano. Porque aunque tengamos la Muralla y la gente se piense que no, Ávila es una ciudad que ayuda mucho a vivir tranquilo a todos los niveles.

¿Qué le parece la ciudad hoy en día?

Igual que hace 35 años. Ha cambiado bastante poco desde que yo nací. 

¿Cómo ve la ciudad en el futuro?

La veo con oportunidades siempre y cuando ocurra lo que decía antes; que abramos un poco la mente y nos dejemos querer a nivel profesional. Hace falta ese cambio de chip, para hacerla una ciudad referente y que la gente venga.

¿Qué puede aportar a la ciudad?

Yo puedo aportar mi proyecto y sobre todo que la población pueda entrenar en condiciones y tener una mejor calidad de vida por tener una mejor condición física. Ésa es mi aportación porque al fin y al cabo es a lo que me dedico. Y también el vivir aquí.