«Es difícil de entender como repentinamente se van todo el esfuerzo e ilusión que he puesto en los Juegos. Puede que sea el momento más duro de mi vida deportiva. Pero no me queda más remedio que asumirlo y pensar en tener una buena y rápida rehabilitación», explicó el triatleta, que no concederá entrevistas por el momento dado el golpe moral que ha sufrido