Tarde de perros, tarde de fiesta. Ni la lluvia, ni el frío, ni el mal estado del terreno de juego impidió que el encuentro entre el Colegios Diocesanos Aqualia y el Real Madrid fuera algo más que un partido. Sólo falló el resultado. Porque lo justo hubiera sido el empate que hasta el 80' mandaba en el marcador. Sería Javi, doblete incluido, el que permitiría al Real Madrid llevarse los tres puntos (1-2) en una tarde en la que el Colegios Diocesanos obligó al líder de la División de Honor a bajar al barro para llevarse el triunfo. Y nunca mejor dicho.