Medio millón de euros para bienes afectados por fuegos de 2022

B.M
-

El dinero llega a través de la Junta y será para San Juan de la Nava, El Barraco, El Hoyo de Pinares y Riofrío

Medio millón de euros para bienes afectados por fuegos de 2022 - Foto: David Castro

La Junta de Castilla y León invirtió un total de 4,2 millones de euros en la rehabilitación de más de 60 viviendas y edificaciones inhabilitadas por los efectos causados por los incendios forestales del año 2022, que afectaron de manera importante, entre otros bienes, a viviendas, enseres domésticos y edificaciones complementarias de las provincias de Ávila, Burgos, Segovia y Zamora, según recoge Ical. En el caso de la provincia abulense se destinó medio millón de euros para San Juan de la Nava, El Barraco, El Hoyo de Pinares y Riofrío.

Ávila fue una provincia especialmente castigada por los incendios de ese año, como sucedió con el de Cebreros y El Hoyo de Pinares y también con Santa Cruz del Valle, llegando a afectar a viviendas que es a lo que se destina este dinero. En este caso se trata de cuatro inmuebles de distintas características que se vieron especialmente desolados y gracias a esos 500.000 euros pueden rehabilitarse. Entre ellos hay alguno de uso hostelero pero también agrícolas-ganaderos que recuperan así lo que perdieron por las llamas. Hay que tener en cuenta que esta  ayudas, que se conceden a nivel regional, se destinan sobre todo son viviendas e inmuebles que se han visto afectados por los incendios hasta el punto de quedar prácticamente en estado de desuso. El dinero se concede una vez valorado por los servicios técnicos de la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio para la recuperación integral en los términos en los que se encontraban anteriormente. Para ello hay unas horquillas económicas de 145.000 euros por vivienda y 35.000 euros por instalaciones complementarias. Cuando se destina a vivienda hay también un incremento de 15.000 euros y 7.000 por edificación complementaria para el menaje doméstico.

En cada uno de los casos el dinero se destina para recuperar lo que había con anterioridad, de modo que quedan excluidas de estas ayudas aquellas viviendas y edificaciones complementarias que, a la fecha de producirse el incendio, ya estuvieran en estado de ruina o de abandono manifiesto, deshabitadas o que no contasen con las preceptivas autorizaciones municipales.